miércoles, 2 de noviembre de 2011

Muerte en La Campana, Colima

En Colima tenemos una zona arqueológica llamada La Campana, cuyo contexto histórico se remonta hasta los últimos años de la Era Antigua. Está ubicada entre dos ríos y orientada hacia el volcán. En primera instancia vemos esa dualidad: agua y fuego, luego que sus construcciones abarcan lo mercantil, lo político y principalmente lo religioso. En ese edificio en forma de campana era donde se hacían los rituales y se sacrificaba para honrar al dios del fuego (volcán).
El alzamiento principal del lugar: La Campana
En cuanto a ese ámbito religioso hay dos incipientes importantes: la muerte y el destino del fenecido. El lugar de los muertos, como para muchas de las culturas prehispánicas, era el Mictlan; para emprender el camino a esa morada, al muerto se le hacían las muy conocidas ‘tumbas de tiro’, que referimos su análoga apariencia al de las bóvedas, localizadas hasta diez metros bajo tierra. Actualmente se cree que la profundidad no sólo dependía de la dureza del suelo, sino del estrato social al que pertenecía el fallecido. Los familiares del difunto lo vestían muy bien y le colocaban objetos alrededor que lo identificaran según lo que haya hecho en su vida. Por último, los pobladores sacrificaban un perro y lo ponían también en la tumba, para que éste ayudara al muerto a cruzar el último obstáculo del camino al Mictlan: un río. Sin embargo, no todos tenían como destino el Mictlan, los guerreros que morían en batalla y las mujeres que perecían en el parto, acompañaban al sol en su ruta: alba y cenit; para luego renacer como el mismo astro lo hace.


El análisis que se ha hecho sobre los objetos encontrados en las tumbas, dejan evidencias claras, y otras inconclusas. Por ejemplo, de acuerdo a las deformaciones de cráneos, se cree que los indígenas sabían de cirugía; sin embargo, no se explica por qué algunos restos o figurillas de barro no tienen extremidades, ¿con qué objetivo se habrá hecho eso? O en general, ¿cuál es la explicación concreta de las tumbas? Si la indiferencia no nos gana, lo sabremos, después de mucho, algún día.
Honestamente: Marionote Valencia.

2 comentarios:

  1. no sabìa de ese lugar que mal, y eso que soy de Colima..........
    Muy buena redacciòn, te serè sincero(a) me gustan màs las redacciones que realizas de la vida diaria...
    Ansioso(a) porque redactes la proxima vez...

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  2. Hola,gracias por tu comentario. La intención del blog también es dar a conocer estos lugares, o información que uno cree que puede servir. Me alegra que ahora ya sepas del lugar y algún día puedas visitarlo junto con tus amistades o familia.
    Aprecio que te interesen las vivencias; de algún modo yo también lo veo más interesante ya que de allí uno forja la experiencia y da fe de la relación con el mundo. Por cierto, así nació este proyecto: sólo narrar y reflexionar experiencias de la vida supuestamente cotidiana.
    Seguro que tú tienes alguna experiencia qué contar, sobre la cual habrás reflexionado bastante. Por aquí nos volvemos a ver. Saludos.
    Honestamente: Marionote Valencia.

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